Firmín, Sam Savage
Novela para jóvenes y adultos que merece una reseña independiente. No vamos a encontrar otra que trate sobre un animal tan peculiar y sea, a la vez, una obra que sólo será realmente apreciada y entendida por quienes sienten la literatura como una pasión. Con ella aunamos el amor por los animales y el amor por la lectura, pues nuestro personaje es un ser adorable que adora los libros.
Firmín es una rata. No hay una especie animal más odiada y perseguida, y además es una rata de biblioteca, que devora libros y cuyo espíritu se enriquece de ellos. Qué contraste más extraordinario, quizá porque ese contraste es aparente. Porque estamos cargados de prejuicios contra este animal y porque no todo el mundo aprende o es capaz de disfrutar y venerar la literatura. Se requiere de una mínima sensibilidad, ¿presente en una rata?
Lee esta novela con los ojos bien abiertos, deja que el personaje entrañable rompa tus tabús y quiérele como merece, compréndele y siéntele. Y acompáñate de boli y papel porque tendrás que anotar muchos títulos de obras imprescindibles que no paran de nombrarse durante la novela.
Firmin es un ser pequeñito, delgaducho y diferente, y no logra comunicarse ni hacerse comprender, un solitario que tiene tanto que compartir y que no puede. Ni las otras ratas, ni los humanos, todos están fuera y alejados de él. Es una rata feucha, que desborda humanidad o «ratabilidad», erudición, pasión, esperanza y fe, destacando como el ser bello y deslumbrante que realmente es.
Te vas a encariñar de Firmin y vas a querer leer, y vas a indignarte contigo misma por no saber más, por carecer del suficiente entusiasmo para vivir y conocer, nutrir tu imaginación y tus experiencias, cuando tú sí puedes.
VOLVERÉ A LEER FIRMIN, buen comentario y estimulación para aceptar a los seres diferentes, leelo ….mirarás a las ratas de otra manera.